
Cuando quieres vender una empresa tienes que seguir un proceso definido de forma cautelosa, y más si se trata de tu propia empresa.
Con el tiempo, puede ser que pierdas interés en tu negocio y busques venderlo para obtener un fondo económico que te permita apostar por nuevos caminos.
No obstante, para vender tu empresa es necesario saber qué pasos exactos hay que dar. Por eso, en la entrada de hoy te explicaremos cómo puedes ejecutar una venta de forma exitosa y qué consejos debes seguir para lograrlo.
¡Sigue leyendo nuestro texto para más información!
Tabla de contenidos
- Cómo preparar la venta
- Vender directamente es un error
- Mantén la confidencialidad
- Apóyate en tu equipo
- Sé transparente y disponible
- Escoge una sola empresa para representarte en la venta
- El precio de la tranquilidad
- ¿Vender o legar a la familia?
- Optimiza la transición
- Prepárate para la situación post-venta
- Conclusión
Cómo preparar la venta
Para empezar, debes diseñar la venta del negocio. ¿Y cómo hacerlo? Pues contando con expertos en realizar este tipo de operaciones para gestionar la venta desde la experiencia de personas cualificadas. Lo que estos expertos hacen es optimizar todos los aspectos de la empresa con el objetivo de aumentar su precio. Por eso mismo es un paso más que importante.
Nuestro consejo, en este caso, es que si quieres vender tu negocio confíes en los profesionales que te ayudarán a preparar la empresa para la venta sin preocupaciones.
Vender directamente es un error
Una vez has preparado la empresa para la venta, desaconsejamos completamente llevar a cabo la transacción personalmente. Si confías en los profesionales, ellos trabajaran con confidencialidad y siguiendo todos los trámites legales, evitando así problemas mayores.
Además, la empresa que te represente te apoyará mostrando una postura objetiva de la operación, estableciendo datos creíbles sobre la misma y ofreciendo su conocimiento para saber actuar durante todo el proceso.
Mantén la confidencialidad
Como ya hemos mencionado, mantener la confidencialidad en el proceso de venta de tu negocio es algo incuestionable.
Esa confidencialidad debe mantenerse en todos los sentidos, incluso para los trabajadores, ya que así evitamos generar preocupación a las personas que hacen vida en la organización. Además, los distribuidores y el público consumidor no tendrán certeza de lo que pueda pasar si averiguan información de la venta de tu negocio.
Por lo tanto, en el proceso de vender una empresa, se debe proceder en total secreto si se quiere conseguir una operación sin inconvenientes.
Apóyate en tu equipo
Para optimizar una futura venta con un nuevo dueño, tu mano derecha siempre debe formar parte del proceso de negociación. Esa persona es la que, al fin y al cabo, ha estado pendiente de todo lo que sucede en la compañía, por lo que se convierte en una pieza clave para el desarrollo óptimo con la nueva directiva.
Tú, como interesado en que la venta se concrete de la mejor manera, debes asegurarte de hacer interesar a tu mano derecha para que sea parte de la venta.
Sé transparente y disponible
La organización que se convierta en el apoyo durante el proceso de venta debe estar al corriente de todo lo que ocurre relacionado con la venta y el negocio en general. Además, tanto la organización de apoyo como la propia empresa deben ser claros con el comprador, garantizando que conozca toda la situación actual de la empresa. La finalidad es evitar los problemas legales o la negación de la compra por desconocimiento de información relevante.
Escoge una sola empresa para representarte en la venta
La empresa en la cual confíe tu asesoría porque saben cómo vender una empresa debe ser la única que te acompañe en todo el proceso.
Es un error confiar en varias organizaciones pensando que te ahorrarán tiempo y conseguirás una venta más rápida. De hecho, sucede totalmente lo contrario: si tienes varias organizaciones asesorándote en la venta, podrías perjudicar al proceso y su confidencialidad, provocando que se estropeen avances o se generen problemas desde varios puntos del proceso.
El precio de la tranquilidad
Cuando llega el momento de fijar un precio por tu empresa, debes pensarlo muy bien y consultarlo con la empresa asesora. Si estableces un precio excesivo, podrías generar problemas en la negociación; por ejemplo, haciendo que el comprador sea más exigente con las condiciones.
En Inverbac te recomendamos que, cuando definas el precio de partida, te metas en los zapatos del interesado y pienses en si tú comprarías el negocio al precio que has puesto. Si la respuesta es no, habla con tu asesoría y define un precio realista y óptimo.
Por lo tanto, si quieres tener un proceso de venta sano y una transacción en buenos términos, procura no ser exigente en el momento de poner un valor a tu negocio.
¿Vender o legar a la familia?
Si tu empresa es un negocio familiar, debes estar seguro de qué acción quieres llevar a cabo.
Por norma general, este tipo de negocios pasan de padres a hijos durante generaciones. Si este es tu caso, te recomendamos consultarles a los herederos si se ven capacitados para estar al frente de la empresa. Además, tú mismo debes interpretar su capacidad, independientemente de su respuesta.
Hay que resaltar que estos cambios pueden dar lugar a problemas, así que antes de tomar una decisión estúdiala detenidamente.
Optimiza la transición
Para que la transición de una nueva gestión se realice de forma efectiva, la manera a través de la cual se ha gestionado el negocio será un factor determinante.
Si eras una persona que actuaba en todas las decisiones y te cerciorabas de que cada empleado cumpliera su función para que los proyectos se ejecutaran correctamente, ejercerás un papel clave en la transición. Si requerías de tus colaboradores para solventar cualquier situación y no estás tan implicado, la transición podría ser más rápida.
Por lo tanto, nuestro consejo es que te sitúes en la transacción según tu papel actual y el que desempeñarás finalizada la venta.
Prepárate para la situación post-venta
Para muchas personas, tener una empresa durante un largo período de tiempo y luego venderla y dar por finalizada la vida empresarial puede resultar difícil de superar.
Por ese motivo, te aconsejamos tener claro qué significa vender tu empresa y tener en cuenta todo lo que implica esa decisión para estar preparado cuando suceda: mentalízate sobre cómo será tu vida sin el negocio.
Conclusión
Después de repasar los aspectos claves para vender una empresa, no olvides que lo más importante es tener una buena actitud en todo momento.
Si tu mente te está diciendo “quiero vender mi negocio”, explícate qué debes hacer y si estás preparado para el proceso y la post-venta.
Recuerda, además, que solo debes contar con una única empresa especializada que te ayude en todo el transcurso para analizar bien el valor que tendrá la propiedad, y también para que la negociación se dé en buenos términos y condiciones tanto para el comprador como para el vendedor.
Como has visto, vender una empresa implica tiempo y mucho esfuerzo, pero con el conocimiento adecuado y un buen asesoramiento, puedes llevar a cabo un buen proceso de venta con objetivos exitosos.
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